Hablar de Julia Hetta es hablar de fotografía de moda pero también de fotografía artística y hablar de Peter Philips es hacerlo del alma creativa de las pinturas de Dior, dicho de otro modo, del maquillaje de la mítica maison francesa, un maquillaje que propone siempre un extra de creatividad y glamour muy parisino y muy Dior. Y cuando confluye el arte de las pinturas de Dior y Peter Philips con la visión pictórica de la fotografía de moda de Julia Hetta, el resultado es una campaña de esas que no te cansas de ver y mirar, una en la que descubres un nuevo detalle cada vez que la observas y, en este caso, una campaña que te hace sentir como si estuvieses en un museo holandés rodeado de cuadros de Rembrant y Vermeer.
Julia Hetta, sueca de nacimiento, se formó como artista en Amsterdam y tiene su base operativa actualmente en París, trabaja para las principales publicaciones de moda y estilo de vida y también para las firmas del lujo más destacadas como Dior, Hermès o Chloé; Hetta es de esos fotógrafos que tienen un estilo propio muy marcado que hace que sus trabajos sean inconfundibles, sucede con las campañas en blanco y negro de Peter Lindbergh y también con los bodegones y retratos de estilo pictórico de Julia Hetta.
Uno de sus últimos trabajos del año ha sido la colaboración con Peter Philips, director creativo de maquillaje de Dior, para presentar las últimas pinturas de la mítica maison francesa, el resultado de esta colaboración es una serie de fotografías que parecen pinturas sacadas de un museo, retratos y bodegones y sólo podría firmar Julia Hetta, probablemente el ojo más pictórico de la fotografía de moda actual.
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