Maquillaje

A cara de rosa

Lily Collins posa para Mert & Marcus mostrándonos cómo afrontar los días a cara de rosa. Y cuenta para ello con la complicidad de Lancôme.

Hace tres años que Lily Collins -hija del músico Phil Collins y ya una reconocida actriz y modelo- es embajadora de Lacôme y, cumpliendo con ese papel, pone cara a las colecciones de la firma cosmética francesa; en esta ocasión lo hace para presentar la propuesta de primavera con la que Lancôme quiere pintarnos la cara en cuanto se acabe el invierno, para la próxima primavera.

Se trata de una propuesta que encaja a la perfección con el mundo de cuentos en el que vive Lily Collins en alguna de sus películas, Absolutely Rôse, un set de pinturas para que salgamos a pelear la vida cada día no a cara de perro sino a cara de rosa porque el rosa, en contra de lo que solemos pensar, es mucho más que un color dulce y romántico, es sutil y favorecedor, enérgico y elegante, femenino por encima de todas las cosas y el tono fetiche de Lancôme para la próxima primavera.

El clásico glamour de París, y de las mujeres de los 50, se presenta con matices nacarados en los polvos compactos que iluminan nuestro rostro, los blush matizan nuestra cara en tres tonos; si el estuche de los polvos compactos, con su forma de rosa, te enamora, no lo hará menos la colección de sombras de ojos y tonos de labios que Lisa Eldrige -directora creativa de Lancôme- ha incluido en un único estuche; la colección se completa con lápices para dibujar en rosa los labios y los ojos, y nuevas versiones de los productos ya icónicos de Lancôme -como sus máscara de ojos o sus eyeliner Grandiôse- en los que el rosa manda en todos sus matices.

El rosa, un color que despierta en ocasiones el amor de las niñas y el odio de las adolescentes, se presenta como el color de guerra por excelencia para plantarle cara al futuro a cara de rosa.