La propuesta de Lancôme parece una utopía porque, si bien todas sabemos que la alternativa a cumplir años es mucho más terrible que una arruga más o menos, lo cierto es que no acabamos nunca de llevarnos bien con nuestra edad, a los 15 nos parece corta, a los 25 apenas pensamos en ella y a partir de los 35 comienza a parecernos demasiado larga... y demasiado notables sus huellas en nuestra piel.
Pues bien, en Lancôme llegaron a la acertada conclusión de que el único modo de hacernos amar nuestra edad era borrar las huellas que ella se empeña en dejar en nuestro rostro; de esa idea surgió un proyecto y de él un serum que es ya un icono de Lancôme y un frasco que no puede faltar entre nuestros cosméticos, Advanced Génifique.
Hemos disfrutado, y seguimos haciéndolo, de la agradable sensación de este serum sobre nuestra piel y de sus más agradables consecuencias, de la luminosidad que aporta a nuestro rostro y de la jueventud que nos regala pero... ¿cuál es la razón de estas sensaciones que parecen fruto más de la magia que de un serum? algo de eso es lo que nos cuenta Lancôme.
Uno de los secretos que guarda este serum son las fracciones de probióticos, el motivo por el que Lancôme recurre a los probióticos para perfeccionar su serum es, visto desde el día de hoy, casi evidente pero lo cierto es que en su momento fue todo un alarde innovador pues apenas se utilizaban estos compuestos en cosmética; claro que sabiendo que los probióticos forman parte de los complejos vitamínicos y que el hombre los consume desde tiempos ancestrales por sus propiedades anti-inflamatorias y anti-oxidantes... ¿cómo no contar con él en este serum?.
Y como las cosas se entienden mejor y, sobre todo, se ven mejor si se demuestran, Lancôme ha contado con Kate Winslet, Lupita Nyong'o y Lily Collins para poner rostro a la magia de su serum frente al objetivo de Mert Alas & Marcus Piggot.
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