En muchas ocasiones, nos dejamos llevar por la grandilocuencia de lo que tiene mayor tamaño, visibilidad, aparente importancia, etc. Todo el mundo ve inmediatamente el armario de la habitación, pero pocos se paran a observar si los cajones tiene holgura o no, y en este pequeño detalle reside la funcionalidad del mismo, y su sentido o fin último. Porque por tan solo dos milímetros más, el cajón podría no entrar o tener holgura, por tan solo dos milímetros.
Al igual que le ocurre al armario, hay pequeñas cosas que son de vital importancia, y por ello es crucial ser impecable con los detalles. En un rescate que realizan los bomberos por ejemplo, dos minutos pueden ser de vital importancia, incluso treinta segundos pueden llegar a marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Lo pequeño es grande en más ocasiones de las que nos imaginamos. Un pequeño detalle decorativo, puede ser lo que haga que una estancia sea más agradable o justo lo que desentone y nos haga sentirnos incómodos.
Se cuenta que Steve Jobs, cuando adquirió su última casa, estuvo mucho tiempo sin poner muebles, que tenía las cosas en cajas, ya que no quería poner ningún elemento dentro de la vivienda, hasta que no estuviera seguro que justo es lo que deseaba y encajaba en ella. Tal vez sea un tanto extremista esta postura, no hace falta llegar a comer en el suelo hasta que todo esté perfecto, pero en cualquier caso, nos muestra claramente cómo se tomaba en serio los detalles de diseño, alguien que creó una empresa que entre otras cosas, es número uno en digamos “estética tecnológica”. Si has utilizado un dispositivo Apple, estarás de acuerdo en que cuidan y mucho, los detalles, y que esto es parte de su fórmula de éxito.
¿A cuántas cosas en nuestra vida, no le prestamos la debida atención al detalle? ¿Cómo podríamos mejorar nuestra mesa de despacho, solo con modificar pequeños detalles? ¿Cómo podemos mejorar la relación con nuestra pareja, hijos o padres, solo con prestar atención a ciertos detalles? Si nuestra salud pudiera mejorar solo prestando atención a algunos detalles, ¿cuáles serían estos?
Recuerda que Pareto ya nos advirtió hace muchos años que el 20% de las cosas obtienen el 80% de los resultados. Tal vez ese veinte sean los detalles que tienes que prestar atención y modificar o crear. Además, es más eficiente desde el punto de vista de esfuerzo y energía, hacer algo pequeño que genere un gran beneficio, que algo grande que genere una pequeña o mínima aportación.
Y no se trata ahora de hacerte un perfeccionista del detalle, porque nuevamente estaríamos cayendo en la grandilocuencia, en este caso la "grandilocuencia del detalle extremo”. Se trata de cambiar la mirada, de prestar atención a lo que es pequeño y sin embargo importante. Por que debemos recordar, que pequeño no significa sin importancia, ni grande con importancia.