En la época navideña son habituales las reuniones de amigos, familiares y de empresa. Sí, estas últimas en algunos casos aún se celebran. Muchas veces vas encantado y otras participas porque sientes que no tienes más remedio. Te hago una propuesta que puede hacerte mucho más divertido el acontecimiento.
Cada uno de nosotros y cada entorno social y según sea nuestro momento vital, interpretamos distintos personajes, también conocidos como arquetipos (puedes ver más información sobre este comportamiento del ser humano en arquetipo junguiano), como el guerrero dispuesto a entrar en acción siempre, el complaciente (no creo que requiera descripción), el conciliador, el sabio, la víctima, el héroe, etc.
Conocerás al personaje por su comportamiento y su tipo de comunicación, y como no podía ser de otro modo, también tú estarás relacionándote desde un personaje ¿cuál? Porqué aquí está lo que de verdad importa, saber cuál es el personaje desde el que nos relacionamos. Muchas veces nos quejamos o estamos incómodos por cómo nos tratan otras personas, o simplemente de cómo se relacionan con nosotros. Bien pues tenemos la capacidad de cambiar en parte esa relación, en tanto dejes de comunicarte desde ese personaje y pases a hacerlo desde otro (no solo me refiero al lenguaje verbal, también al no verbal, y a tus acciones) el resto de personajes no tendrán más remedio a cambiar su interacción contigo, aunque al principio ésto cueste ya que tienen el hábito de hacerlo de otro modo, tu insistencia ganará sin lugar a dudas, ya que además, tú estarás haciendo ésto de forma consciente, pero ellos no, su cambio será más bien inconsciente.
Vivimos en una "divina comedia", siempre podemos ver el lado divertido de cada relación que tenemos.