Stephen Fry es londinense, ácido, bipolar, ateo y humanista. Actor, director y escritor, ha sido reconocido por The Observer como uno de los 50 mejores comediantes de la historia. Su trayectoria en la gran pantalla —Los amigos de Peter, Wilde, Gosford Park, Guía del autoestopista galáctico— y, sobre todo, como actor de teatro —The Common Pursuit, Cell mates— no ha eclipsado en modo alguno su faceta como dramaturgo y novelista. Al contrario, porque Fry escribe como habla, sin tapujos ni recato, con tremenda ironía y sentido del humor.
En la Universidad de Cambridge, Stephen Fry se licenció en literatura inglesa. Allí conoció a Emma Thompson o Hugh Laurie, con quien formaría el dúo A bit of Fry and Laurie, y formó parte del grupo de teatro Cambridge Footlights. Si su vocación dramática fue temprana, la narrativa le llegó en los 90 cuando publicó su primera novela, The Liar. Después escribió otras tres, diversos musicales, varias obras de no ficción y una extensa autobiografía de tres volúmenes.
Su personalidad intensa y poco convencional le ha llevado a protagonizar diversas protestas como la emprendida contra el sultán de Brunéi por su legislación contra la homosexualidad o contra Tony Blair, la guerra de Iraq o la llamada tercera vía. Y también alguna que otra polémica mediática. Fue sonada la de los premios Bafta de 2016 que le obligó a cerrar su cuenta de Twitter a causa de la avalancha de críticas en la red a causa de sus comentarios durante la presentación de la gala.
Anagrama publica Mythos, el último ensayo de Fry, que se adentra en la mitología griega con energía y su característico humor. Y lo hace a su manera, como si se tratase de una superproducción norteamericana o una puesta en escena alucinante, propia del mejor teatro brit. Se asoma a la ventana de los mitos como nunca lo había hecho nadie hasta ahora. “Con pasión y sin renunciar al rigor, cuenta los avatares de sus personajes como en la más trepidante de las novelas”, afirman desde la editorial.
La obra recupera los personajes y aventuras de los mitos griegos, desde el Caos primigenio y el nacimiento de Atenea de la cabeza de Zeus, hasta los amoríos de Eros y Psique. En el trayecto no falta Pandora y su temible caja. Salir de caza con Artemisa o probar el sabor del inframundo junto Perséfone son algunas de las andanzas que colman casi 500 páginas de idilios, rivalidades, venganzas, anhelos, masacres, suicidios, pasiones, tragedias, guerras, rebeldías, culpas, victorias…