El pensamiento de Fernando Pessoa no se limitó al exclusivo concepto de la literatura. Al contrario, para el poeta portugués cualquier forma de arte es parte del universo literario, pues es en el mundo de las letras donde se aglutina el resto de expresiones artísticas. Partiendo de esta idea y de la cita firmada por su heterónimo Álvaro de Campos —todo arte es una forma de literatura—, el Museo Reina Sofía reconstruye uno de los periodos más fascinantes y desconocidos del arte luso: las primeras décadas del siglo XX.
Fernando Pessoa (Lisboa, 1888-1935) desarrolló una literatura compleja, tejida de fragmentos y voces calidoscópicas diseminadas entre las diferentes personalidades de sus heterónimos (más de cien). Como todo en su vida, la relación del poeta con el arte es ambivalente: siempre interesado en los ismos, no llegó a abrazar por completo ninguno de ellos.
La muestra se aproxima a la peculiar vanguardia portuguesa a través de la lectura de la obra de Pessoa. Y es que el poeta determinó el desarrollo de las vanguardias propias de su país, creando conceptos como el paulismo, el interseccionismo o el sensacionismo que sus coetáneos portugueses acuñaron como su forma de entender el arte. Por este motivo, la exposición presta también especial atención a las revistas en las que escribió Pessoa, como A Águia, Orpheu, K4 O Quadrado Azul, Portugal Futurista o presença, y que actuaron como caja de resonancia de estas ideas de vanguardia.
Con el escritor como hilo conductor y los tres ismos pessoianos como columna vertebral, Pessoa. Todo arte es una forma de literatura descifra los postulados de esa otra vanguardia riquísima y versátil a la que sucumbieron también artistas europeos como Sonia y Robert Delaunay, abanderados del sensacionismo. Una disidencia que, además forjó el esqueleto de una segunda modernidad portuguesa velada por la muerte prematura de sus tres figuras más emblemáticas (Mário de Sá-Carneiro, Amadeo de Souza- Cardoso y Santa Rita) y la llegada al poder del dictador Salazar.
El museo madrileño ha reunido más de 160 piezas (pintura, dibujos y fotografía) de artistas tan significativos como José de Almada Negreiros, Amadeo de Souza-Cardoso, Eduardo Viana, Júlio Dos Reis Pereira o Sarah Affonso, además de los Delaunay.
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Hasta el 7 de mayo de 2018. Lugar: Edificio Sabatini, 1ª Planta. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Comisariado: Ana Ara y João Fernandes
Galería de imágenes
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Robert Delaunay, Portuguesa (La gran portuguesa), de 1916. Cera sobre lienzo
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Abel Pereira da Fonseca. Retrato Fernando Pessoa
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José de Almada Negreiros, Retrato de Fernando Pessoa, 1964. Museu Calouste Gulbenkian - Coleção Moderna. © Almada Negreiros, VEGAP, Madrid, 2017
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Jorge Barradas. Las vendedoras ambulantes de pescado, 1930. Museu Nacional de Arte Contemporânea
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Amadeo de Souza-Cardoso. Los galgos. 1911, óleo sobre tela, 100 x 73 cm
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Abel Abrantes Manta. Jogo de Damas, 1927, óleo s/ tela, 106 x 116 cm (Col. Museu do Chiado)
