El Centro Botín presenta Calder Stories, una muestra inédita que cubre cinco décadas de la carrera artística de Alexander Calder. Comisariada por Hans Ulrich Obrist, director artístico de las Serpentine Galleries de Londres, y organizada en colaboración con la Calder Foundation de Nueva York, la exposición descubre historias apasionantes y poco conocidas de la obra del famoso artista norteamericano.
Hans Ulrich Obrist comenzó en 1990 a reunir información sobre un tipo de arte poco común: el de los proyectos no realizados. “Unos caminos no recorridos que conducen a un filón de ideas artísticas: proyectos olvidados, proyectos directa o indirectamente censurados, proyectos incomprendidos, proyectos oprimidos, proyectos perdidos, proyectos irrealizables… Aunque ya no es posible preguntar a Calder sobre ello, pensé que podría ser interesante aplicar la metodología de lo irrealizado a la historia del arte. Esta exposición del Centro Botín nos brinda la fascinante oportunidad de hacerlo por primera vez”, asegura el comisario de la muestra.
Algunas de las obras más conocidas de Alexander Calder fueron fruto de colaboraciones con importantes arquitectos, coreógrafos y compositores de su tiempo, unas historias que hasta la fecha no han sido prácticamente estudiadas. Se trata de proyectos que en su mayoría vieron la luz, aunque en ocasiones no llegaron a materializarse.
Calder Stories se embarca en una exploración de lo que el artista dejó tras de sí, añadiendo nuevos matices y complejidades al conocimiento su obra, considerada un pilar fundamental del arte del siglo XX.
Entre los proyectos nunca realizados que pueden contemplarse en el Centro Botín, se cuentan una serie de seis maquetas creadas por Calder en 1939 para acompañar la propuesta de Percival Goodman para la construcción de la Smithsonian Gallery of Art (Washington D.C). También un conjunto de casi dos docenas de bronces de 1944, creados por sugerencia de Wallace K. Harrison para un edificio de estilo racionalista. Debían haberse construido en hormigón con una altura de entre nueve y doce metros, pero jamás se materializaron.
En el ámbito de las artes escénicas, se presentan varios bocetos realizados entre los años treinta y cuarenta detallando unas complejas coreografías abstractas y las propuestas que Calder denominó “objetos-ballet”. Se incluyen escenografías para un ballet con música por Harrison Kerr. La exposición incorpora animaciones digitales de algunas de esas composiciones, creadas expresamente para la ocasión.
Calder Stories sigue el proceso creativo de Alexander Calder durante estas y otras experiencias. Engloba una visión holística de las intenciones del artista a través de bocetos y obras efímeras, que brindan al espectador la oportunidad de contemplar piezas nunca antes vistas. La muestra integra varios encargos fílmicos a artistas contemporáneos e inspirados en Calder y su obra, ampliando así el legado de colaboraciones con cineastas llevadas a cabo por el propio artista en su día.
La exposición podrá visitarse en la segunda planta del volumen expositivo del Centro Botín hasta el próximo 3 de noviembre.
Galería de imágenes
-
1
-
2
-
3
-
4
-
5
-
6
-
7
-
8