Retratista consumado de la alta sociedad neoyorquina —aunque jamás nadie le encargó un retrato—, amante extremo de la figuración en plena era del expresionismo abstracto, Alex Katz (Brooklyn, 1927) ha sabido plasmar como nadie la elegancia, la belleza y la sofisticación. Y aunque es el retrato de lo sublime la faceta más reconocida y admirada del pintor estadounidense, el paisaje también forma parte de su imaginario personal. Una piedra angular, a menudo ignorada, en el desarrollo de su larga trayectoria artística que empezó a cultivar casi desde el inicio y que hoy exhibe el Museo Guggenheim Bilbao.
Alex Katz, aquí y ahora es el título de esta singular retrospectiva que, a través de treinta y cinco obras, destaca la importancia del paisaje en el universo artístico de Katz, al tiempo que nos descubre cómo el instante, la inmediatez (hilo conductor de la exposición) se convierten en el eje del diálogo entre percepción y conciencia, naturaleza y arte, figura y paisaje. Pero además muestra el lado más “abstracto” del pintor. Aunque Katz rechaza el abandono de la imagen que propugnaba el expresionismo abstracto, sí adopta la energía y lógica formal de este movimiento, desarrollando un paisajismo peculiar mediante una pintura rápida y física, de formas simples, líneas intensas y descriptivas, limpias, reduccionistas.
Más que representar las imágenes de una manera fiel, a Katz le interesa en este caso capturar el instante. Ese momento que se manifiesta como un flash explosivo antes de que la imagen se enfoque, es lo que él denomina el tiempo presente. Lo que plasma y transmite a través de composiciones integrales cuya apariencia evoca la espontaneidad de Jackson Pollock. Pero es sólo apariencia, pues Katz determina su composición de antemano, logrando un dinamismo poético, similar a la danza que invita al espectador a acompasarse con él.
Estructurada en siete secciones, la muestra explora el desarrollo del paisaje dentro de la trayectoria de Alez Katz a lo largo de los últimos veinticinco años, recorriendo las diferentes etapas en las que el artista ha cultivado este género —desde creaciones de los años ochenta hasta sus últimas pinturas monumentales realizadas en la actualidad— que revelan, además, su extraordinario control sobre los materiales, la iluminación, la yuxtaposición de formas y las gradaciones cromáticas.
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Alex Katz, aquí y ahora
Museo Guggeheim Bilbao.
Fechas: del 23 de octubre 2015 al 7 de febrero 2016
Comisarios: Michael Rooks, Wieland Family Curator of Modern and Contemporary Art, y Petra Joos del Museo Guggenheim Bilbao
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