Si el invierno es el gran reino de las bufandas en formato XL, de lana y con estampados a cuadros, la primavera es la época de los pañuelos ligeros y suaves, de estampados mucho más llamativos y optimistas, que salen a la calle en formato XS para arropar el cuello, una de las zonas más sensuales, de las mujeres elegantes y sofisticadas.
Así es la modelo Sibui Nazarenko en la última campaña de Valentino, fotografiada por Johan Sandberg. Los nuevos pañuelos de la maison salen a la luz con estampados sutiles que emulan el encaje negro sobre fondo blanco dibujado a mano, discretos motivos florales que recuerdan a la delicadeza de la alta costura y, para las más modernas que apuestan por un look algo más informal y desean dar el toque de personalidad con un pañuelo sin abandonar el refinamiento, cierto aire fluor mezclado con verde militar. Tres tendencias a los que Valentino siempre le dedica tres diseños diferentes para poder elegir sin tener que renunicar a la calidad y poder cumplir con las mañanas y las noches de frío que aún nos trae la primavera con un toque distinguido y original.
Todos ellos en seda y algodón que reflejan el espíritu de contemporaneidad que la firma quiere transmitir en estos últimos años, nutriéndose de contrastes visuales y artísticos sintetizados en un estilo vibrante y distintivo. Algo que, sin duda alguna, define a la perfección los pañuelos de Valentino.