Lucir

Tocados con toque made in Spain: Mibúh

Una selección deliciosa de sombreros y tocados made in Spain.

Las buhardillas son de esos lugares de una casa, que los nombras y dan para más que la definición de un simple espacio. Pero no estaría mal empezar por ahí. Definiendo, digo.

Así que consultamos a la Real Academia Española de la Lengua, que es fuente segura y que en este caso nos lleva a su acepción de desván, o "parte más alta de la casa, inmediatamente debajo del tejado, que suele destinarse a guardar objetos inútiles o en desuso". Aunque a nosotros nos gusta más referirnos a ella, como ese lugar en el que encontrar pequeños tesoros, porque además de resultar más estimulante, resulta mucho más poético.

Y hablar de buhardillas, en este caso no es ningún elemento de distracción, es más, resulta fundamental para hablar de esta firma española de complementos. Porque Mibúh proviene de ahí, de ese concepto, de "mi buhardilla". No la mía claro, sino de la María Jesús López, la diseñadora detrás de esta marca que lleva cuatro años en el mercado elaborando piezas absolutamente deliciosas.

Su recorrido en el mundo de la sombrerería empieza en 2007, a los que accede tras haber finalizado su carrera como diseñadora de interiores, y haberse formado durante dos años en el Chelsea College of Art and Design.

Su primera tienda la abrió en Tomares (Sevilla), donde comienza su expansión, y desde allí  donde también está su taller, confecciona sombreros, pamelas, tocados y tiaras exquisitas, adentrándose también en la fabricación de bolsos y cinturones.

Su lookbook de temporada, el que se corresponde con el Otoño/Invierno 2014-15, pone los dientes muy largos y nos deja con ganas de boda y fiesta, que es cuando cualquiera de sus diseños tienen uso exclusivo.

Y en sus materiales, plumas, hojas, tules, rafias, y colores que van del granate al azul, del beige al naranja, del verde al rosa, y que se lucen en sus modelos y entre sus diferentes texturas.

Tocados para admirar, tocadas para triunfar y acertar seguro, porque sus piezas son pura armonía y no es difícil atreverse.