Tocada de vanguardia.

Blanca, o no, pero tocada y radiante sí, sí quieres. Porque nos siguen gustando las bodas, el traje de un día, el peinado de una tarde, los tacones de un rato y el sí quiero de siempre pero con otro aire, otro look, aspecto y atuendo, anillarte nos sugiere romper moldes.

Y para romper moldes nada como obviar la tiara o diadema, las flores, el velo... lo clásico en general, para sorprender con unos tocados evocadores y originales que colmarán de sentido y belleza tu aspecto de un día, de ese día.

La primera opción nos encanta, una chistera, pero no una de tantas, no, una pequeña, coqueta, elegante, discreta y con lazos que bien pudieran ser plumas, para que luzcas como una reina, princesa o celebrity en el glamour de Ascot; más nuestra es la siguiente opción, más castellana, del medievo, de Doña Jimena y su Cid, un punto más sobria, un tocado de corte medieval que recuerda en su forma a la cota de malla; recuperamos el punto de glamour de Ascot con el atrevimiento y desenfado del tango o el cabaret en un tocado asimétrico que casi llega a caer sobre la frente; y por último la clásica tiara pero de otro corte y otro paño, sin la pompa y boato del oro blanco y los diamantes.

Anillarte reinventa las clásicas tiaras, diademas y velos en cristal blanco y anillas de metal, trabajando sus diseños en una colección de tocados para novias atrevidas y vanguardistas, para mujeres de las que se atreven a romper moldes... y al sí quiero.

Anillarte

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