Zenith se prepara para celebrar su 150º aniversario y ya ha hecho público uno de sus relojes conmemorativos que es un homenaje al navegante Cristóbal Colón. Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II es el segundo reloj que Zenith dedica al descubridor de América. Según Zenith, Cristóbal Colón y su fundador, Georges Favre-Jacot compartían “el espíritu de descubrimiento y el amor por los retos. Fueron una misma pasión y un mismo espíritu de aventura lo que les guió hacia nuevos horizontes: el primero al lanzarse a los océanos para abrir la ruta occidental hacia las Indias y el segundo, al fundar Zenith en 1865, creando una de las primeras manufacturas relojeras industriales”.
La propia marca califica el reloj Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II como una “de sus más fascinantes creaciones relojeras” y lo justifica porque “conjuga su mecanismo complejo y exclusivo con un exterior y una decoración excepcionales”.
Sin abundar mucho en las características técnicas, el reloj Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II es sorprendente desde un punto de vista mecánico porque incorpora tres grandes innovaciones relojeras: el sistema patentado gravity control con el que mantiene el corazón del mecanismo siempre en posición horizontal, sea cual sea la posición de la muñeca, para que no afecten a su funcionamiento las leyes de la atracción terrestre; el mecanismo de transmisión huso-cadena, que mantiene estable la energía mientras dure la reserva de marcha y, por último, conquista la precisión con un volante que bate a una frecuencia de 36.000 alternancias/hora y secuencia el tiempo en décimas de segundo.
El mecanismo que alienta su tiempo es de El Primero, de cuerda manual, formado por 939 piezas, de los que 354 forman el calibre, 173 componentes constituyen el módulo gravity control y 585 la transmisión huso-cadena.
Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II sorprende por su el efecto visual que provoca su mecanismo, especialmente el gravity control a la altura de las 6 horas. Su esqueleto se ve en toda su magnitud. La platina ha sido ahuecada a mano para que luzca el logotipo de la marca y un cortejo de estrellas –la estrella es el símbolo de Zenith-. Arropa las indicaciones que se muestran en diferentes contadores: el disco de las horas y minutos se posiciona a las 12 h, la reserva de marcha a las 4 h y a las 9 h el segundero. Las tres esferas están decoradas con un delicado guilloché que ha sido posteriormente esmaltado en blanco.
La mayor sorpresa del reloj Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II está oculta en el fondo de la caja del reloj. Zenith ha creado un fresco en miniatura para representar la epopeya de Cristóbal Colón en 1492. Esta obra artística se ha fijado el movimiento mediante un sistema de apliques de oro. Los ingenieros de Zenith tuvieron que rediseñar el calibre para hacer posible esta obra de arte con la que la manufactura suiza pone en evidencia sus dotes más artísticas. En la pintura descubrimos a Cristóbal Colón con la bandera de la monarquía castellano-leonesa que financió su viaje, sus tres carabelas –la Pinta, la Niña y la Santa María-, un loro y dos indígenas que le ofrecen al descubridor frutas tropicales exóticas. La decoración ha sido grabada y pintada a mano con todo lujo de detalles.
Técnica y arte se encuentran en el reloj Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II. Su caja es de oro rosa de 45 mm y la correa es de piel de caimán marrón con triple cierre desplegable en oro rosa.
Los coleccionistas tendrán que darse prisa para conseguir su reloj porque solo lo más rápidos podrán adquirir un Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II pues la edición está limitada a 10 relojes en todo el mundo, aunque por la decoración manual del fondo, cada reloj es en realidad una pieza única.
No será la única sorpresa relojera que Zenith tiene reserva a su incondicionales. Academy Christophe Colomb Hurricane Grand Voyage II es solo un avance.