Reloj pulsera para tocar la hora sin verla.
Relojes

Tocar el tiempo del Eone The Bradley

Creado como una solución para invidentes, en realidad es una máquina del tiempo que permite saber la hora sin necesidad de mirar tu reloj.

Cierra los ojos e intenta saber qué hora es. Algo tan cotidiano como ser conscientes de la hora puede complicarse cerrando simplemente los ojos. ¿Escucharla? Es posible. ¿Preguntarla? Obviamente, sí. Ahora imagínate ciego. Dependes de alguien para saber cuánto falta para que suceda lo que esperas. Aunque una reunión o el cine, pueden ser trampas mortales para saber la hora sin que tu interlocutor sepa que te desespera o la luz del móvil haga evidente que estás que te quieres ir. También existe la libertad de saber el tiempo sin mirarlo, sin preguntarlo, sin escucharlo y es el reloj The Bradley de Eone.

A simple vista, es una pieza de diseño sutil y minimalista que da la hora aunque no tenga manecillas. En cambio, tiene una bolita superior que va girando segundo a segundo y otra más en su lateral, que marca la hora. Todo un juego magnético de relojería suiza que va marcando el tiempo de una manera poco usual.

Y es que The Bradley, nació a partir de encontrar una nueva solución para saber la hora sin depender de tus ojos. El equipo de Eone se inspiró en la historia de Bradley Snyder, un ex oficial naval que perdió su vista tras una explosión durante la guerra de Afganistán en 2011. Pero un año más tarde, ganaba medallas de oro y plata en natación en los juegos paraolímpicos de Londres 2012.

Ese despertarse a oscuras de un día para el otro, convirtió la vida del soldado en un cúmulo de autodesafíos y recompensas que lo ayudaron a sobreponerse de las nuevas limitaciones corporales. Algo que entiende muy bien el equipo de diseño que trabajó en este reloj. Desde su estudio, analizan, crean y producen objetos universales. Creen que el buen diseño es el aquel que es útil a la mayor cantidad de personas, a pesar de su condición. Y The Bradley es para ver y tocar. Un reloj pulsera superior, para quien quiera verlo y sentirlo.

Es la independencia de aburrirse sin que nadie se entere. Sólo con que pases tus dedos por su cuadrante de titanio, notarás el relieve de las marcas, las bolitas y rápidamente sabrás con exactitud qué hora es. Si por algún motivo tocas algunas de las pequeñas esferas demasiado fuerte, bastará sólo un gesto de tu muñeca para que vuelvan a su lugar.

Y no hace falta ser ciego para no querer ver. The Bradley es una manera de saber la hora de la manera más discreta, tanto si estás en una reunión de negocios, una fiesta, ante la charla eterna que no quieres oír o en el cine o el teatro, por ejemplo.

Tocar el tiempo. Sentirlo, presumirlo, disfrutarlo. La libertad de saberlo sin mirarlo, sin preguntarlo, sin escucharlo.