El tiempo se mide en las historias que vives en él, en las realidades que fueron antes ideas y llegaron después a ser ciertas gracias al esfuerzo, el tesón y el talento de quienes las alimentaron... Quizá por eso existe este reloj, porque hubo un día en el que un fabricante de navajas y cuchillos necesitó medir el tiempo en su legendaria historia.
Y es que la historia de Victorinox es una historia de ideas y talento que llena ya el tiempo de cuatro generaciones suizas, un tiempo que se ha ido llenando de productos, líneas de producto y nuevas historias propias y ajenas porque, cada navaja suiza que acompaña a los astronautas de la NASA o a los soldados del ejército de Suiza o el de otras naciones calla sin duda una historia apasionante.
Así empezó Karl Elsener, fabricando excepcionales navajas para el ejército suizo, tan excepcionales que se exponen en el Museo de Arte Moderno de Nueva York desde los años 70; y con tal origen, en tal país, con tantas historias de las que hacen vida y llenan horas, era inevitable caer en la tentación del tiempo y sus relojes.
El que hoy os presentamos, es la versión 2012 del modelo Airboss, un reloj de apariencia sencilla que, además de la precisión suiza, encierra la calidad de las tecnologías militar y aeronáutica.
Airboss encierra la historia de los aviadores de antaño, la autenticidad de aquella aeronáutica, de aquel saber sobrevolar el mundo y cruzar el cielo; esconde la dureza de los soldados viejos, los de navaja suiza, encarnizadas batallas y guerra de los 100 años; es un reloj de caballero en toda regla, sobrio, elegante, confiable... y bello.
Caja de 42mm de acero, cristal de zafiro, agujas y cifras luminescentes sobre esfera blanco plateado o gris antracita, hora militar y ventanilla de fecha, bisel de cuenta atrás interior con escala de 60 minutos, sumergible, correa de cuero curtido y pespunteado... Un reloj para vivir tu historia.