Las modas llegan, pasan y vuelven a reaparecer no solo en las pasarelas sino también entre las colecciones de las firmas relojeras de más rancio abolengo y en Baselworld.
Así, en la última década hemos pasado de los relojes oversize a los formatos mini, para desembocar este año en una tendencia de relojes unisex que, además de contentar a mercados como los asiáticos o el norteamericano, satisface las exigencias de las mujeres que demandan relojes mecánicos de cierta entidad.
Ejemplos no faltan, y aquí damos cuenta de algunos de ellos, tres: el modelo Fifty Fathoms de Blancpain, el BR V1-92 Black Steel de Bell & Ross y el Speedmaster de Omega. A continuación, los detalles.
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