Relojes

La belleza de la bestia: Bell & Ross X1 Tourbillon Sapphire

Este skeleton único y transparente se convierte hoy en nuestro objeto de deseo.

Bell&Ross lo ha vuelto a hacer con el Bell & Ross X1 Tourbillon Sapphire.  Mucho más que un reloj, una obra de arte, una belleza de la ingeniería, una joya única técnica y estética. Un hipnótico reloj en la línea e identidad de la marca. Una moderna pieza de alta relojería singular en todos los sentidos, porque si nos gustan los skeleton, ¡cómo no nos va a gustar un skeleton cuya maquinaria es visible desde cualquier ángulo, toda ella, completa...!

Un calibre único, el BR CAL 285, con un tourbillon (con el ampersand de la marca) visible desde cualquier ángulo gracias a su especial caja de zafiro, casi tan duro como el diamante y de hecho el segundo material más duro del planeta, “imposible de rayar”. Una genialidad de Bell & Ross no exenta de complicaciones, lo que es bueno para el resultado implica un excepcional, delicado y largo proceso de producción: la caja se talla de un solo bloque de zafiro y lleva hasta 8 piezas más del mismo material en su maquinaria de titanio y acero.

Horas y minutos en el centro, cronógrafo de 30 minutos a las 11, cronógrafo de 60 segundos a la 1, indicador de reserva de marcha a las 9 y el tourbillon a las 6. Las manillas de hora y minutos llevan además Superluminova para ver la hora en la oscuridad, cosas sencillas pero prácticas como sus 100 horas de reserva de marcha. Flojea en el Water Resistant de 3 ATM / 30 metros, que aguanta salpicaduras de agua pero que en realidad no es para jugársela a meterse con él en la piscina. Pero ?quién querría ponerse este reloj para hacerse unos largos o darse una ducha? A nosotros nos parece que el precioso Bell & Ross X1 Tourbillon Sapphire es más para la contemplación inusitada de la belleza de una bestia única. Y para lucirlo con orgullo en cualquier momento.

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