En la manufactura de IWC en Schaffhausen todas las miradas y esfuerzos están puestos en su reloj más icónico y el que más beneficios le ha reportado, el Portugués. Y razones no le faltan para que el Portugués sea el gran protagonista del 2015 pues apaga este año las velas de su 75º aniversario.
La leyenda del Portugués nació en 1939 cuando dos comerciantes portugueses importadores de relojes, Rodrigues y Teixeira, fueron a la manufactura de IWC para solicitar un reloj de pulsera con la precisión de un cronómetro de marina. Para ellos IWC creó el primer Portugués con una caja de grandes dimensiones pues acogía en su interior el mecanismo de un reloj de bolsillo, el único que en aquella época podía satisfacer las exigencias de precisión que demandaban los dos portugueses.
Como es costumbre en todas las marcas, las efemérides se celebran con el lanzamiento de un modelo especial del reloj homenajeado y la manufactura de Schaffhausen no iba a ser una excepción. IWC ha creado una edición sorprendente del Portugués, el Portugieser Cuerda Manual Ocho Días Edición “75th Anniversary”, pues es una reedición de un reloj apenas conocido. La fuente de inspiración ha sido un modelo original que estaba en manos de un coleccionista privado que presenta algunos rasgos a los que no estábamos habituados como son los índices horarios, las cifras árabes y el círculo de las horas que están vigorosamente remarcados que aportan un toque vintage a los nuevos relojes.
La versión más fiel al original es la que tiene la caja en oro rojo de 18 quilates y esfera plateada con los contornos en marrón. El otro Portugieser Cuerda Manual Ocho Días Edición “75th Anniversary se presenta con la caja en acero y esfera en negro mate con los indicadores en verde claro.
Como el primer Portugués, los relojes del aniversario llevan el segundero a las 6, pero lo que es nuevo es que la ventanilla de la fecha se ubique en su interior, según IWC porque “lo reclama el confort exigido en el siglo XXI”.
La caja de los dos relojes Portugieser Cuerda Manual Ocho Días Edición “75th Anniversary mide 43 mm y tiene el bisel estriado y acanalado característico de la familia Portugués, muy fino para, que junto con el cristal de zafiro arqueado, la caja parezca más fina, a pesar de sus 12 mm de altura, y la esfera más amplia.
IWC equipa los relojes del aniversario del Portugués con un movimiento de carga manual con una reserva de marcha de 8 días. El indicador de la energía se muestra en el fondo, visible a través del cristal de zafiro, y así la esfera de los dos nuevos Portugueses conserva su sencillez y elegancia.
Del Portugieser Cuerda Manual Ocho Días Edición “75th Anniversary IWC ha creado 175 ejemplares con la caja en oro rojo y 750 relojes de la versión de acero. Los dos modelos se aferran a la muñeca con una correa de piel de aligátor fabricada por la firma italiana de calzado Santoni.