Tissot ha dado a luz en su manufactura de Le Locle a nuevas criaturas. Pertenecen a la familia Vintage y por esta razón el oro es el gran protagonista, ya sea en color amarillo o rosa de 18 quilates.
Otra de las señas de identidad de la colección Vintage es su estilo retro pues todos ellos evocan el glamour de los relojes Tissot de tiempos pasados.
Los relojes masculinos de Tissot Vintage son elegantes y les gusta a los hombres por sus líneas claras y depuradas, que rompen las barreras del tiempo; además, son el recuerdo familiar que pasa de padres a hijos y que nunca pasan de moda.
Las dos nuevas versiones están disponibles con esfera blanca o negra con decoración Clous de Paris en el centro rodeada por cuatro números romanos e índices a juego con la caja de oro rosa de 40 mm. En su interior encontramos un calibre automático, el Powermatic 80 de Tissot con 80 horas de reserva de marcha, visible a través del cristal de zafiro del fondo. Los dos modelos se unen a la muñeca con una pulsera de piel, marrón en el modelo con esfera blanca y negra en el reloj con esfera negra.
La versión masculina de cuarzo apuesta por el negro en su esfera nacarada y en su pulsera de piel. La caja es de oro de 40 mm, al igual que sus índices bastón y sus manecillas del mismo estilo. Su look es estilizado, puro y clásico.
El reloj Tissot Vintage femenino es seductor con su esfera nacarada con toques con mucho glamour y un toque retro. Se presenta con esfera nácar en blanco sobre la que se posan 12 diamantes que iluminan las horas y se abre la ventana en la que se asoma la fecha; sus agujas caminan con determinación sobre una superficie delicadamente decorada. Su corazón es el mecanismo automático Powermatic 80 y el último detalle es la pulsera de piel en color blanco, a juego con su esfera.