Relojes

Blancpain Villeret Quantième Complet GMT

El Blancpain Villeret Quantième Complet GMT, una pieza de absoluta belleza de las Grandes Complicaciones de Blancpain.

Completo, anual y perpetuo. Estos son, de menor a mayor complicación, los tres tipos de calendarios más habituales en relojería. Sus precios, obviamente, crecen también en el mismo sentido. La diferencia entre cada uno de ellos reside “sencillamente” en el número de veces que debemos corregir manualmente las indicaciones de este calendario. De este modo, el completo, el que nos ocupa, es el que más atenciones requiere por nuestra parte, dado que deberemos corregirlo manualmente cada mes que tenga un número de días distinto de 30. El nivel intermedio, el calendario anual, reduce la necesidad de corrección manual a una sola vez al año, el 28 de cada mes de febrero. Por último, la excelencia de la complicación, el calendario perpetuo, aquel que dispone de lo que podríamos llamar una memoria mecánica que nos permite olvidarnos de nuestro reloj. Como norma, los calendarios perpetuos actuales no precisan de corrección manual hasta el año 2100.

Es la primera de las variantes, la de calendario completo combinada con la indicación de fases lunares, una de las mayores especialidades de Blancpain. En esta ocasión y como resulta sencillo deducir por su nombre, el Blancpain Villeret Quantième Complet GMT, añade la indicación de un segundo huso horario. Haciendo gala de su experiencia en la implementación de esta complicación, la manufactura de Le Brassus es probablemente la que mejor minimiza las “molestias” que suponen las frecuentes correcciones manuales que se requieren. Basta con actuar sobre un pulsador para corregir cómodamente todas las indicaciones de manera simultánea. Además, desde un punto de vista estético y no por ello menos importante, este pulsador se esconde debajo de las asas por lo que no afecta en lo más mínimo a la apariencia de la caja.

Oro blanco y oro rojo son las opciones con las que Blancpain lanza este calendario completo, en una caja de 40 mm de diámetro y 11,80 mm de altura. La esfera, opalina blanca en los dos casos, es el resultado de un ejercicio de proporcionalidad y legibilidad. Desde el centro parten tres agujas, dos de ellas, las de forma ojival y tipo esqueletizado, son las responsables de las indicaciones de horas y minutos. La tercera, con su extremo en forma de flecha y color rojo, apunta a una escala de 24 horas para informar del segundo huso horario. Por lo que respecta a las indicaciones del calendario, las encontramos en una doble ventanilla abierta a las 12 para el día de la semana a la izquierda y el mes a la derecha. La fecha se implementa con la característica aguja serpentine, azulada en esta ocasión, que apunta a la escala más perimetral.

Correa de piel de aligator negra para la referencia en oro blanco y marrón para la correspondiente al oro rojo son las combinaciones escogidas por Blancpain para completar cada una de las dos piezas. Para los más atrevidos y que además no les importe que el precio se incremente de manera considerable, cada uno de estos dos guardatiempos puede acompañarse de una milanesa en el mismo material que el aplicado a la caja.