Un diamante o una perla, un rubí, una esmeralda, oro blanco, rosa o amarillo, plata, lapislázuli, azabache... incluso piedras y metales menos preciosos; fuera como fuese lo cierto es que las joyas acostumbran a estar cargadas de simbología.
Pulseras, anillos, pendientes, collares, gargantillas, brazaletes, tiaras... unas dicen te quiero y otras lucen un quiero que me quieras estando como están pensadas para que deslumbres, conquistes y enamores.
Aquí tienes una pequeña selección de algunas de las joyas que os hemos mostrado esta primavera... para que deleites el gusto y el deseo o para que decidas regalártelas... o regalárselas.