Las joyas no son únicamente accesorios o complementos, no son meros objetos decorativos, a lo largo y ancho de la historia hemos visto como las joyas son, en realidad, verdaderas obras de arte, a veces diseñadas con piedras y metales preciosos y en otras ocasiones con materiales más sencillos pero siempre recreándose en la creatividad y la belleza. Así son también los pendientes -Stroke- que Catalina D'Anglade ha diseñado inspirándose en la obra Secundino Hernández, un artista contemporáneo español que desde que en 2013 y en la feria ARCO en Madrid comenzara a ser reconocido, no ha dejado de recibir el aplauso del público en general y de los críticos de arte en particular.
Stroke significa trazo y, a la vista de los pendientes así llamados, el nombre requiere poca explicación, son algo así como el garabato de una firma hecho arte sobre un papel para acabar siendo una joya tallada en oro; una joya que tiene además mucho de exclusiva porque se trata de una edición limitada. Además, la propia Catalina D'Anglade cuenta que cada pendiente es único y singular porque es fruto de un trabajo de pura artesanía, dicho de otro modo, la limitada producción de los pendientes Stroke es 100% artesanal.
Ese proceso de producción artesanal comienza en el estudio de Catalina D'Anglade, es ahí donde, usando varillas de latón, se modela cada pieza para ser enviada después al orfebre que es quien se ocupa de crear esas pequeñas esculturas en oro macizo de 18 quilates. No hay dos Stroke iguales.
A primera vista parecen sólo un trazo pintado al azar pero a nada que te acerques a ellos descubrirás que los pendientes Stroke son puro arte, inspirados en los trazos que te enamoran desde los cuadros de Secundino Hernández y hechos realidad modelados como pequeñas esculturas de latón antes de hacerse preciosos la convertirse en oro.
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