A veces es difícil condensar en una gota toda la esencia de una firma. Recopilar todas sus cualidades y resumirlas en una pieza bella y elegante a la vez. Este ha sido el objetivo de Omega con sus últimas propuestas en joyería y, afortunadamente, lo ha conseguido.
El colgante Fine Jewellery Dewdrop de la firma suiza representa la excelencia de décadas de trabajo, la calidad que solo consigue la joyería artesanal y la elegancia de un diseño sobrio. Se trata de una pieza atemporal formada por siete diamantes en forma de gota y una reinterpretación del símbolo de Omega realizada en oro blanco de 18 quilates.
Una joya eterna, entre otras razones por el significado que tiene el símbolo de la firma. Omega es la vigésimo cuarta y última letra del alfabeto griego y los fundadores de la marca la eligieron como nombre para expresar la perfección sin límites temporales implícita en cada pieza de su catálogo.
El colgante Dewdrop es ligero, sofisticado y su brillo irradia juventud y una luz cargada de sensualidad que favorecerá a todo aquella mujer que lo luzca en su cuello. Es delicado, cautivador y va acompañado por una cadena también de oro blanco. Tiene un precio de 1870 euros.