Zares, dinastías y emperatrices fueron testigos durante años de la belleza y el ingenio de grandes joyeros del imperio Ruso, únicos en la creación de tesoros a base de cortezas de abedul, filigranas, tejidos de perlas o pinturas a base de laca en miniaturas. Todo un arte que ha sobrevivido a lo largo de la historia y que se ha ganado un reputado lugar entre el sector de los grandes artesanos joyeros del mundo.
Un acontecimiento que, sin duda alguna, era merecedor de ser rescatado para traspasar el conocimiento y el cuidado de los detalles a una era moderna, donde poder seguir admirando piezas fabricadas a través de técnicas únicas. Masterpeace es una de las firmas herederas de este conocimiento, dando forma a la mayor parte de sus creaciones en las empresas más antiguas de Rusia: esmaltados en rostov y encajes de oro en Torzhock, además de contar con la ayuda de empresas familiares con tradiciones que han mantenido durante siglos en pequeñas aldeas o pueblos ubicados en los montes del país.
Para la colección primavera-verano, Masterpeace rescata los accesorios de cabello confeccionados con flores, a través de diademas con un estilo romántico y delicado. Las perlas, las plumas y el terciopelo son los encargados de convirtir cualquier vestido simple en una pieza de alta costura a la altura de complementos que cuentan con detalles extremadamente cuidados para hacer de estas joyas un lujo con historia…
Una producción mágica para unas piezas exquisitas que cuentan con una fina apreciación de las tendencias actuales combinada con unos materiales de trabajo ancestrales que hacen que cada uno de sus productos alcancen un valor incalculabre.
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