Vanessa Mooney lanza su primavera inspirada en el lejano oeste, en el más seductor de los looks vaqueros y también en la capacidad de seducción que le ha sido siempre reconocida a las mujeres de las tribus de indios americanos; se trata de una propuesta fiel a la esencia de la firma en cuanto a que mantiene ese equilibrio perfecto de funcionalidad y elegancia que es ya santo y seña de Vanessa Mooney.
La campaña a través de la que la joyera americana nos hace llegar sus propuestas mantiene ese mismo equilibro, juega con el atardecer y los gestos falsamente descuidados que se convierten en poses de lo más seductor en las que, como no podía ser de otro modo, deslumbran las joyas de Vanessa Mooney.
Las piezas que componen Easy Rider, la última colección de Vanesas Mooney, lucen inspiración étnica lo que las convierte en un preciado objeto de deseo no sólo por su belleza y su funcionalidad sino porque esa es precisamente una de las tendencias más notables de la temporada, el mismísimo Vuitton y también Louboutin se han rendido a ella.
Oro, plata y cuero, estilo vaquero e indio, inspiración étnica de origen africano que se refleja en los tonos rojizos y azules de las cuentas que forman pulseras, brazaletes, collares o pendientes; todo en Vanessa Mooney es evocador y creativo, funcional y bello, apto para todo tipo de mujer, para todos los gustos y estilos posrque su diversidad creativa da lugar a piezas de lo más variado y variopinto.
En esta ocasión la variedad va de lo étnico a lo racial, pasando por lo indio y lo vaquero, en definitiva, por civilizaciones que un día fueron y otras que lo son todavía hoy; claro que ese es el origen de la colección, de ahí en adelante la creatividad de Vanessa Mooney manda, de ahí que sus piezas combinen de modo perfecto su raíz con el toque de funcionalidad y glamour que las convierte en propuestas de lo más apetecible y seductor para ponerle joya al verano.
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