Hablar de verano y gafas de sol es todo uno porque, si bien las gafas son ya un accesorio más de tantos como lucimos a lo largo y ancho de todo el año, en verano su importancia se multiplica e incluso quienes en otros momentos del año las eluden, llegada la primavera y el verano rinden sus ojos a ellas.
Linda Farrow, que ya nos echaba las gafas a la cara allá por los años 70 y que, de unos años más cercanos a esta parte, se ha hecho más célebre si cabe por diseñar las gafas de grandes de la moda como Oscar de la Renta o Kris van Assche, nos traslada a un escenario evocador y tentador para presentar sus propuestas de primavera y verano 2016.
Se trata de una isla remota y cálida en la que el tiempo parece haberse detenido regalándonos un verano para sentirlo en la piel, que no en los ojos, ellos se muestran siempre lujosa y elegantemente protegidos por Linda Farrow.
La colección está pensada para viajeros de primavera y de verano de gafas grandes y siluetas bellas tanto en su figura como en la montura de sus lentes; son gafas de notable presencia y diversidad de formas y tonalidades, gafas para viajar y soñar para lucir perfectos y para ver la vida del color que a cada cual le alegre más sus días.
Y es que la vida es como la ves y la miras y es también como ella te ve y te mira a ti a los ojos... o las gafas, porque tras los cristales oscuros, pensados para proteger tus ojos de las inclemencias del sol, se oculta un modo de sentir y vivir que es un contraste de la discreción propia de quien se esconde tras sus gafas y de pura moda para quienes utilizan las gafas como lo que son, un accesorio de moda.
Y dado que no hay moda sin campaña, he aquí una de Mariano Vivanco para Linda Farrow, todo belleza, todo seducción...
Galería de imágenes
-
1
-
2
-
3
-
4
-
5
-
6
-
7
-
8
-
9