Steve McQueen nace en Indiana, al sur de los Apalaches, en el segundo estado de menor tamaño de los Estados Unidos después de Hawai. Se hace actor y en el ’63, después de haber probado suerte en el cine con unas cuantas películas, le llega la fama con La gran evasión.
Su estilo empieza a marcar tendencia, conociéndosele bajo el sobrenombre de The King of cool. Su forma de vestir y de complementarse traspasan las fronteras de la gran pantalla. El gran público empieza a querer lo que tiene, lo que quiere, lo que luce.
Así que allá por los años ’60 la marca per il sole, Persol, que en sus comienzos centraba su producción en la fabricación de gafas para aviadores, se convierte en icono de la Dolce Vita, gracias a estrellas como Marcello Mastroianni, y a personajes como el de Steve McQueen en El caso de Thomas Crown.
Y aquí la marca italiana con origen en Turín, consigue crear un mito en su producción, el modelo PO714. Las primeras gafas plegables de la historia que aún hoy fabrican, en más colores y acabados, y que son un homenaje a una época y a un estilo: el de Steve.