Lucir

Contigo al fin del mundo

Las maletas RIMOWA son estables, cómodas y fáciles de manejar. ¿Se le puede pedir algo más a una maleta?.

Los que ya llevan a sus espaldas algún que otro kilómetro lo saben: no hay compañero de viaje más fiel que una maleta. Da igual el medio de transporte elegido, las horas de espera en aeropuertos o las temperaturas extremas, ellas siempre están ahí, guardando todo lo que necesitamos y sobre todo recopilando historias en cada viaje.

En 1937 la marca alemana RIMOWA revolucionó el mercado diseñando la primera maleta de metal ligero. El fundador de la empresa, Richard Morszeck Warenzeichen –de cuyas iniciales proviene el nombre de la firma-, decidió desde un primer momento apostar por la fabricación de maletas con tres características clave: la calidad, la ligereza y el diseño.

Todos sus modelos mantienen una mezcla entre innovación y tradición, además de una estructura con ranuras que los hace inconfundibles y que se ha mantenido durante generaciones. Las maletas RIMOWA son estables, cómodas y fáciles de manejar. ¿Se le puede pedir algo más a una maleta?.