Para dar el primer paso y bailar al ritmo vaquero con unas auténticas Sendra Boots son necesarios doscientos cincuenta previos. Los doscientos cincuenta pasos que conforman el proceso de fabricación artesanal de unas botas cuya marca es sinónimo de tendencia, resistencia, confort, calidad y diseño a partes iguales. Cortar y moldear las pieles, bordar, troquelar o calar los motivos que marcan su esencia, coser y proporcionar a cada bota un acabado perfecto son algunos de esos pasos que logran convertir cada par de botas en un ejemplar único e irrepetible pues el 90% de la producción de las Sendra es artesanal.
Muchas son las sorpresas que nos trae la nueva colección de esta histórica firma española que no olvida en ningún momento su indiscutible gusto por lo auténtico ni la cuidada producción de sus piezas, siempre fabricadas con mimo y listas para acompañarnos durante mucho, mucho tiempo.
Para nosotras, la primavera despierta en Sendra con modelos muy atractivos: botas y botines de corte cowboy con trenzados y troquelados de inspiración romántica, fabricados con cueros blandos muy trabajados para adaptarse a nuestras piernas como una segunda piel; combinados con shorts o vestidos lenceros aportan ese irresistible toque boho chic imprescindible para lucir durante esas largas, dulces y cálidas tardes de verano. Para marcar el paso de las amazonas urbanas, los perfiles clásicos de las camperas se moderan y modernizan redondeando las puntas y sorprendiéndonos con suaves tonalidades. Los chicos se ‘atan’ al estilo de los modelos con cordones: botines desgastados en la puntera, tonalidades y pieles envejecidas para diseños contundentes y un guiño al pasado de la mano de zapatos de corte clásico tipo Oxford, troquelados y fabricados con pieles de diferentes tonos y texturas. Un auténtico lujo a nuestros pies.
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