"Llevar un sueño en los pies, es comenzar a hacer realidad los sueños”. Así pensaba Roger Vivier, uno de los grandes maestros zapateros del siglo XX, y así vivió y contagió su pasión por los zapatos a miles de mujeres de todo el mundo.
Roger Viver es el culpable de que ahora luzcamos despreocupadas stilettos infinitos, el autor de los tacones virgule –en forma de coma-, y siempre será recordado por las hebillas de Pilgrim, el hermoso zapato de charol negro, que lucía que Catherine Deneuve en Belle de Jour, un zapato que se ha convertido en un objeto fetiche, marca de la casa, e imitado hasta la saciedad.
Su prodigiosa imaginación ha hecho que los zapatos de Monsieur Vivier hayan sido elevados a la categoría de arte; sus extravagancias siempre fueron esmeradas hasta el más mínimo detalle y su estilo inconfundible, sofisticado y distinguido.
19.750 euros. Ese es el precio pagado en subasta por el zapato que Roger Vivier diseñó para la Princesa Soraya en 1962. Nacido de su capacidad para hacer arte, se ha convertido en el zapato más caro del mundo y ha regresado a la Maison Vivier para evitar la dispersión de patrimonio. Si lo deseas, ya puedes ir a contemplarlo.