Diana Vreeland es uno de los personajes más curiosos, interesantes y geniales de cuanto el mundo de la moda haya conocido. La que fuera la editora de moda del Harper's Bazaar y Editora jefe de Vogue, sembró su vida y la historia de momentos, anécdotas, conexiones y sentencias para llenar varios libros.
Responsable de curiosidades como haber conectado al Oleg Cassini y Jackie Kennedy dando lugar a un estilo y una época, o de descubrirnos a Lauren Bacall, vivió los sesenta al mando de Vogue emocionada con una época que exaltaba lo excepcional, como ella misma, como esa excepcional forma de vestir que impresionó tanto al editor del Harper's Bazaar como para incorporarla a la plantilla.
El espíritu extraordinario de Vreeland y ese modo transgresor y extravagante de entender la moda inspira a Longchamp para una colección de bolsos (clutch, shopping) para este otoño invierno que toma como máxima el "never fear being vulgar, just boring", entre los que destacan los seis modelos edición limitada en piel rojiza de zorro de pelo largo, de becerro y de cordero imitación pitón en verde granate, avestruz kaki, estampado de camuflaje, de cordero de pelo largo en duck blue, cuero metalizado o antracita… y cadenas doradas pulidas y satinadas como asas en un final redondo para una colección en la que sin duda "más es más".
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