Bolsos

La manta clutch de Alexander Mcqueen

El más informal y ligero de los bolsos de la colección de otoño de Alexander Mcqueen.

El clutch es un tipo de bolso que se ha convertido en un básico para las noches, imprescindible en cualquier evento que se precie, es una pieza que en algunos casos como los diseñados por Alexander Mcqueen rozan ser pequeñas obras de arte.

Alexander Macqueen nos dejó hace unos años, desafortunada perdida, pero dejo la firma habiendo marcado su estilo de chico malo británico, uno de los diseñadores más aclamados y cuyo legado ha sabido llevar con maestría su colega Sarah Burton, que ha sido una parte fundamental de la marca, y que afianza cada vez más sus colecciones en cada temporada.

No en vano su trayectoria la avala, y de ahí que sea aclamada por la crítica en cada colección que presenta,  desde su nombramiento como directora creativa de la marca, ha impuesto un enfoque más artesanal, pero siempre respetando la técnica en el trabajo que siempre ha tenido la firma, algo que se desprende de sus creaciones. Como los clutchs, esos bolsitos pequeños donde entra lo justo, pero que se hace imprescindible en cualquier look de noche.  Es un complemento que cada vez vemos más en las pasarelas, y en diversos eventos, pasando de alfombras rojas a nuestro día a día combinándolo no solo con trajes de noche sino también con unos vaqueros.

Entre otros tipos de clutch de la colección de este otoño – invierno, encontramos el manta clutch, de todos mantiene el estilo más informal y ligero con diversos estampados y acabados, desde prints de flores, piel labrada, seda o efecto joya entre otros. Materiales de alta calidad y un diseño atemporal, que combinan con cualquier outfit y consigue meterse en nuestros armarios y ser objeto de deseo con cada nueva temporada.

La firma Alexander Mcqueen ha sabido sacar partido a este tipo de bolso, a lo largo de las distintas temporadas ha reinventado el clutch y sigue haciéndolo, con calaveras, piel de serpiente, tachuelas o la bandera británica, pero siempre manteniendo un equilibrio entre lo rebelde y elegante.