Podría ser uno de los inventos mecánicos de Dr. Arliss Loveless para chantajear al presidente Ulysses S. Grant en su intento de hacerse con todo el territorio norteamericano y repartirlo con ingleses, franceses y españoles -no sin quedarse una parte-, aunque se la ve más entre las manos de Artemus Gordon para inmortalizar y tener un archivo de todos sus disfraces, o para retratar la belleza de Rita Escobar, mientras Jim West se ladea el sombrero condescendientemente.
Porque ese look del más salvaje oeste que tendría un sencillo acomodo en la película Wild Wild West protagonizada por Will Smith, Salma Hayek, Kevin Kline y Keneth Branagh, es el que inspira también el diseño de estas dos Lomo de La Sardina, como delatan sus nombres: Coyote y Bell Star, el segundo como homenaje a la bandolera más famosa del oeste, una mujer bien educada que acabó en malas compañías y a quien los periódicos de la época convirtieron en una leyenda, el primero por la agudeza de un animal ligado al salvaje oeste. Y todo eso con un cuidado trabajo de diseño al que no le falta detalle. Y más allá de la gracia, e incluso del motivo, la mecánica y las lentes de estas cámaras, su sencillo uso y el clásico aire Lomo de cada toma, hacen de estas cámaras un precioso juguete que cuesta cerca de 180€ y que incluye el flash para que incluso de noche sólo tengas que apuntar y disparar.
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