Un día dos amigos apasionados del vino se preguntaron si con tanta tecnología y tantos avances científicos no sería posible el milagro de hacer vino en casa, de un modo sencillo, con tan sólo agua y pocos ingredientes más. Uno de ellos es Kevin Boyer, sommelier experto en vinos y fundador de una de las más aclamadas bodegas de Napa valley, Boyancci, que además es presidente de Customvine, empresa que se dedica crear vinos personalizados. El otro, Philip James, un químico y empresario inglés afincado en Nueva York y apasionado por el vino.
La respuesta a su pregunta era sí, se puede. Su idea, transformar la industria del vino. Tan solo necesitaron 12 meses para desarrollar su idea, The Miracle Machine, que reproduce el proceso de las grandes bodegas para conseguir hoy por hoy crear un vino en sólo 3 días. ¿Y qué vino? Pues despejando temores, de los mejores: Cabernet Sauvignon, Chardonnay, Pinot Noir, Sauvignon Blanc, Borgoña y una variedad Toscana.
El proceso es tan sencillo como elegir el tipo de vino que uno quiere hacer en la App de The Miracle Machine, poner los ingredientes que ésta te indica en la máquina y esperar los tres días que tarda en hacerse. Sí, no hay más. La App, disponible para iphone y android, controla The Miracle Machine. Dentro encontramos un hay una cámara de fermentación con sensores, traductores, calentadores, bombas que controlan el ambiente en el que fermenta el caldo, miden las cantidades de azúcar, filtran el oxígeno… y un microcontrolador asegura que el proceso se realiza en las mejores condiciones. Suena a ciencia ficción, pero parece que el resultado es inmejorable.
Eliges qué tipo de vino, pones los ingredientes y en marcha.
Eso sí, uno espera que sea mucho más simple de lo que es, cuando se habla de ingredientes pensamos en ‘pues ponemos las uvas…’ y no! Los ingredientes necesarios para preparar el vino hay que comprárselos a The Miracle Machine: levadura, concentrado de uva… su idea es crear un club de de bajo coste por el que con 10 dólares al mes puedas tener kits de producción de vinos diferentes como para crear tu propio vino a la semana, aunque estiman que la producción de una botella costará nada más que dos dólares.
Lo malo, el vino que produce no es duradero y tiene una vida máxima de dos semanas. Y el precio, cerca de 500 dólares si lo compras cuando consigan lanzar al mercado las primeras 2.000 unidades, algo que está pendiente aún de financiación mientras se deciden a lanzar la página de Kickstarter, pero si eres de los que se lanzan, puedes reservarla ya por 299$. Un precio bastante bajo para el milagro de convertir el agua en vino.