Dice el diccionario que una atmósfera es un aire o un estado del aire que rodea un lugar abierto o que está contenido en un lugar cerrado. Camino por la calle Paseo de la Habana, en el centro de Madrid, y me atrapa 1001 Atmosphera, un local de 900 metros cuadrados, dividido en dos plantas, luminoso, atractivo, que genera unas ganas irresistibles de mirar. Entro y no sé si me encuentro en una tienda de ropa y decoración, en un local de copas extravagante, en una venta ocasional exclusiva para socios o en una galería de arte moderno. Comienzo a recorrerlo y paso media hora viendo ropa moderna y divertida, bisutería alocada, objetos vintage, complementos para hippies y hípsters, productos de belleza, objetos de decoración atrevidos y algunos clásicos y una venta en rebajas de prendas de chachemire suave a precios imbatibles.
María Jesús Juste y Elena Aresti, con trienios en marketing, comunicación y relaciones públicas, se inspiraron en locales de Tel Aviv, una ciudad mágica para mí, para crear un espacio diferente, una atmósfera atractiva y entretenida, un shopping único de moda, decoración y tendencias abierto a nuevos diseñadores, multimarca, en el que se mezclan esquinas de marcas y diseñadores con colecciones y eventos. El local está inundado de luz y dedica la mitad, en la planta baja, a colecciones permanentes de seis meses de creadores y marcas consolidadas o que se abren camino y la planta superior a eventos efímeros de al menos tres días en los que cabe todo, desde presentación de colecciones y productos a desfiles de moda, pasando por exposiciones, degustaciones o master class. Me encuentro muchas tiendas en una tienda diferente.
Marís Jesús me cuenta que han pretendido crear “algo nuevo, europeo, exclusivo pero accesible, divertido, de calidad y nuevo. Quien entra aquí puede salir sin nada, pero feliz, con un ramillete de prendas que no necesita pero le vienen bien, con una nueva imagen, con regalos diferentes o con un objeto de decoración inesperado. Y además estamos apoyando a nuevos diseñadores y a nuevas marcas que buscan abrirse hueco en este mundo complejo del shopping”. Y de verdad que lo han logrado. En esta atmósfera que te invita a pasear y a consumir no hay dependientes sino jóvenes que te ayudan a encontrar lo que buscas o lo que, una vez que te ves atrapado por la atmósfera sin haberla buscado, te invita a caer atrapado por diseños para todo tipo de gustos, mezclados con arte, talento creativo y diseños atractivos. Un concepto diferente, un espacio nuevo para comprar que después de un año se ha consolidado como local referente de diseño y moda en este Madrid cosmopolita.
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