El fabricante suizo de relojes de lujo Audemars Piguet, creció más rápido que sus competidores en 2014, pero la empresa familiar ahora tiene que afrontar la fortaleza del franco suizo.
El año 2014 fue un éxito para Audemars Piguet, su facturación alcanzó los 700 millones de francos suizos y el volumen de ventas aumentó un 9%.
En contraste, se espera que el crecimiento general de la industria relojera suiza según la ‘Féderation de l’Industrie Horlogère Suisse’ FH, será de un solo dígito. Las cifras anuales las publicará FH a principios de febrero.
Jasmine Audemars, presidenta de la compañía se mostró relativamente tranquila sobre la revalorización de la divisa helvética, "En la historia de la compañía hemos pasado por muchas cosas, y no es la primera vez que tenemos que enfrentar desafíos". Si los precios de los exclusivos relojes van a aumentar o no, es algo que su presidenta no aclaró durante la clausura del Salón Internacional de Alta Relojería en Ginebra (SIHH).
La marca de relojes Audemars Piguet es considerada junto con Patek Philippe y Vacheron Constantin, una de las tres grandes de la relojería suiza de lujo. Fue fundada en 1875 por Jules Louis Audemars y Edward Piguet Auguste Le Brassus en el Vallée de Joux, y desde entonces la empresa es de propiedad de la familia, habiendo superado dos guerras mundiales y varias crisis económica.
"Estamos muy contentos del transcurso del año 2014", señaló la presidenta. La razón por la que ella cree que Audemars Piguet ha obtenido mejores resultados que el resto del sector, es que contrariamente a la competencia, tienen una presencia menos pronunciada en el mercado chino.
Audemars Piguet cuenta con 41 boutiques en todo el mundo y tiene proyectado llegar a 50. Para evitar ser dependiente de los vaivenes de cada uno de los diferentes mercados, la compañía persigue repartir de manera equitativa sus actividades de distribución y ventas entre Asia, Medio Oriente, Europa y América. "Esperamos un mayor crecimiento en el mercado estadounidense", asegura la Sra. Audemars.
Pero Audemars Piguet en 2015 debe hacer frente a las dificultades de la fortaleza del franco suizo. "Cuando planeamos el año 2015, las circunstancias eran muy diferentes a las actuales. Ahora tenemos que ajustar nuestros cálculos a la nueva situación, y no es muy agradable". La compañía económicamente es muy sólida. "Podemos pasar la 'tormenta' sin tener que limitar nuestras actividades de investigación y desarrollo de nuevos productos”, aseguró la presidenta de la exclusiva marca de relojes.