Los relojeros suizos enfrentan tiempos muy complicados en China que es uno de sus principales mercados. La contracción de las ventas en China se ve agravada por la reciente devaluación del yuan.
Los mercados financieros mundiales continúan recuperándose de la repentina devaluación del yuan que realizó el banco central chino a principios de este mes, y que ha tenido como resultado la caída de la divisa de casi un cinco por ciento frente al dólar en cuestión de días. El movimiento hizo temblar a la industria relojera suiza, que ya ha visto menguar sus ventas en China. Antes de la devaluación del yuan, las exportaciones de relojes suizos a China se habían contraído casi el 40 por ciento en julio.
Después de anunciar la devaluación del yuan el pasado 11 de agosto, las acciones del gigante de artículos de lujo Richemont, propietario de marcas como Cartier o Piaget se desplomaron inmediatamente más de un 4 por ciento, Swatch, propietario de marcas como Tissot, Longines y Omega, cayó un 3,9 por ciento.
Jean-Claude Biver, gurú de relojería del gigante del lujo LVMH , aseguraba a AFP, que la industria relojera suiza sería capaz de absorber cualquier aumento de los costos vinculados a la medida tomada por el banco central chino. Algunos relojeros advierten que no se debe sobreactuar, insistiendo en que la devaluación del yuan no tendrá un gran impacto en las ventas e incluso podrían mejorarlas. Swatch, por ejemplo, considera la medida como "positiva", ya que según la compañía es probable que estimule el consumo, e insisten en no tener planes de aumentar los precios en China.
Si bien la devaluación del yuan hace que sea más caro importar bienes de lujo en China, por otro lado abarata los costos de producción locales. Para una empresa como Swatch, que emplea a alrededor de 2.600 personas en China, principalmente en sus divisiones de marketing, ventas y servicios al cliente, esto podría significar grandes ahorros.
Sin embargo, el impacto de la devaluación de la divisa china es difícil de cuantificar, aseguran los analistas. "Si la devaluación del yuan es limitada y se lleva a cabo de forma controlada, sería positivo para la industria relojera suiza", aseguraba Jon Cox analista de Kepler Cheuvreux a la AFP en un correo electrónico". Se reduce el diferencial entre los precios de Europa y China, lo que significa que se podrían comprar más relojes en China y se reduciría el mercado gris", añadió Cox.
Debido a otra devaluación, la del franco suizo, hace unos meses algunas exclusivas marcas ya habían optado por bajar sus precios en China en un intento por frenar mercados paralelos. Pero esta decisión ahora que se ha devaluado el yuan es un problema, ya que no seria muy positivo elevar los precios nuevamente para compensar la disminución del valor del yuan, explica Luca Solca, analista del sector del lujo de Exane BNP Paribas que añade que para proteger sus respectivas reputaciones, estos relojeros optarán por asumir la devaluación del yuan, y "van a sufrir". Lo que de alguna manera sugiere que a los que no bajaron sus precios les irá mejor. Solca asimismo aseguró que se necesitaría una devaluación del 20 por ciento o más para reducir las ganancias en el sector del lujo en un 5 o 10 por ciento.