El próximo 4 de abril se subastará en Hong Kong el que fue en su día el diamante más caro nunca subastado... y es que era el más caro del mundo pero perdió tal condición cuando su comprador no pudo hacer frente a los pagos correspondientes a su adquisición, esa es la razón por la que The Pink Star continua hoy en manos de Sotheby's a pesar de que hace 18 años que De Beers lo descubrió en una mina de Sudáfrica y convirtió aquella gran piedra de 132,5 quilates en una joya de brillo deslumbrante, un anillo de platino con una soberbia piedra de oro rosa de 59,60 quilates.
The Pink Star fue extraído en Sudáfrica en 1999, De Beers tardó casi 2 años en convertirlo en la incomparable piedra que es hoy -el diamante rosa más grande del mundo- y Sotheby's se ocupó de subastarlo en 2013; dado que el comprador no hizo frente a los pagos correspondientes, la piedra está desde entonces en posesión de la célebra casa de subastas que, tras ver en 2016 como Christie's subastaba el que es hoy, oficialmente, el diamante más caro del mundo, debió pensar que ese título debía haber sido suyo y no sin razón: el importe por el que se vendió The Pink Star al comprador fallido superaba los 80 millones de dólares, lejos de los 58 que alcanzó el Oppenheimer -el diamante más caro del mundo... por el momento-.
La Estrella Rosa ha sido tasada por un valor superior a los 70 millones de dólares pero cuentan que si el próximo 4 de abril la puja alcanza los 60 millones se considerará la mejor de las ventas, quizá porque lo sea pero también porque entonces sí, Sotheby's habrá subastado el diamante más caro del mundo... Estaremos atentos.
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