El Financial Times informaba ayer sobre las buenas perspectivas de la compañía Samsonite en China. El fabricante estadounidense de maletas y equipaje ha mejorando considerablemente sus resultados por las medidas que tomó la compañía para distanciarse de los productos de lujo vinculados a la corrupción de China. Las ventas netas en China crecieron un 32 por ciento en el primer trimestre de este año.
Antes en los escaparates se exponían los productos mas caros, ahora lo que se hace es mostrar los productos de precio medio para que el cliente no recele. Ramesh Tainwala, presidente ejecutivo de Samsonite, asegura que China es un mercado clave, que ha mejorado notablemente desde que comenzaron la promoción de productos de menor precio.
Samsung ha sustituido en los escaparates las maletas de cabina de 600 dólares, por otras de 300 y ha entrenado a su personal para promover los productos de precio medio, en lugar de los productos más caros.
La casa de moda británica Burberry y el grupo de joyería francesa Cartier, se encuentran asimismo entre las compañías de lujo que han reducido los precios en China, en un esfuerzo por adaptarse al nuevo clima económico.
El Financial Times hace hincapié en que Samsonite también se ha visto obligada a alejarse de los grandes almacenes, que en el pasado eran un canal muy importante para las ventas de artículos de lujo, ya que los clientes chinos tienen miedo de ser vistos en su interior debido a las severas leyes contra la corrupción del funcionariado que se han impuesto. En los grandes almacenes se generaban alrededor de dos tercios de las ventas de Samsonite en China hace tres años, este año pueden caer hasta un mínimo de un tercio.
En Asia se registraron el 41 por ciento de las ventas totales de Samsonite, que ascendieron a 567 millones de dolores en el primer trimestre de 2015, un aumento del 11 por ciento con respecto al mismo período del año anterior.