La semana pasada, a 70 kilómetros de El Cairo se inauguró la primera fábrica del gigante galo de la cosmética L'Oréal. El proyecto en el corazón del mundo árabe, se finalizó en el año 2013, sin embargo, su inauguración oficial se ha ido retrasando hasta la semana pasada. El conglomerado de la cosmética francés, cuenta ya con 43 fábricas en todo el mundo.
Con una inversión total de cincuenta millones de euros, esta nueva fábrica sirve para satisfacer la creciente demanda de los consumidores de la región. La nueva fábrica de L’Oréal en Egipto, será el centro de producción para productos de consumo en la región de Oriente Medio y el Norte de África.
Geoff Skingsley, vicepresidente ejecutivo de L'Oréal, para Oriente Medio y África señalaba que "Con la creciente demanda de productos de belleza de alta calidad en toda la región, es crucial para L'Oréal tener una planta de producción operativa cerca de estos mercados clave, para poder adaptar la oferta de productos a las especificaciones locales. La fábrica de El Cairo refleja nuestra confianza en la continua expansión del mercado de Oriente Medio y África del Norte, y nuestro firme compromiso con Egipto como centro estratégico de producción".
Las instalaciones tienen 17.000 m2, con un potencial de expansión de tres veces su tamaño actual. La nueva planta de L'Oréal está dedicada a la producción de productos para el cuidado y coloración del cabello, así como para el cuidado de la piel. Fabrica productos L'Oréal Paris y Garnier y el 10% de la producción abastece al mercado interno egipcio, mientras que el 90% se exporta a otros países de la región. En 2014 la planta produjo 50 millones de unidades y tiene el potencial de duplicar su capacidad de producción en los próximos tres años.
Hay 14 compañías francesas operando en Egipto, que han creado 33.000 puestos de trabajo con una inversión total de 3.400 millones de euros. La fabrica de L'Oréal en El Cairo emplea a casi 200 personas.